Springe direkt zu Inhalt

AMÉRICA LATINA Y EL PENSAMIENTO FILOSÓFICO

a b c d e f g h i
j k l m n o p q r
s t u v w x y z  

José Gaos es el que propone, impulsa e inaugura el programa de la filosofía de lo mexicano, o el que incita a sus dicípulos a que hagan una filosofía de lo mexicano. En esta idea está implicito el problema de si hay o no hay filosofía en América Latina, de qué es filosofía y en que medida una filosofía puede tener adjetivos, ser nacional o regional, ser filosofía alemana o filosofía etiope o filosofía mexicana o filosofía paraguaya.

Lo que yo pienso es que si hablamos de filosofía como discurso reflexivo en general, obviamente este discurso es posible en cualquier parte, pero las formas del discurso reflexivo son muy variadas, y sólo una de las formas del discurso reflexivo es la forma filosófica en el sentido moderno del término. Y esta forma filosófica moderna es la que se ha dado en llamar filosofía sin más. Filosofía sin más quiere decir entonces el discurso filosófica inagurado en Francia, Inglaterra y Alemania. Y esta filosofía sin más va a ser siempre exótica en América Latina, o va a ser siempre una filosofía que se cultive sólo en círculos muy restringidos; que puede cultivarse incluso con muy buena calidad en toda América Latina, pero que va a ser un enclave de un discurso reflexivo que no corresponde a la reflexividad llamémosle así- del discurso espontáneo latinoamericano. Entonces yo creo que sí es posible, que sobre todo ciertos estratos, ciertas clases, ciertas regiones, zonas de la cultura latinoamericana, puedan cultivar este discurso filosófico, que incluso pueden conectarse, hablar las lenguas filosóficas y hacer su filosofía latinoamericana un poco a caballo entre su propia lengua y las lengua del discurso filosófico que han elegido. Como siempre ha sucedido, se ha hecho filosofía latinoamericana que es en verdad cuasifrancesa, cuasiinglesa, cuasialemana, y esto me parece muy genuino; pero lo que yo creo es que el discurso reflexivo propio, más amplio, más fundamentado y por lo tanto más alimentado por la problemática social, histórica de América Latina, no es este discurso filosófico sin más.